Con el karma de tener cada paso de mi vida planificado.
Peleando desde siempre por cada cosa que me propongo.
Deseando con el alma que se cumpla aquel dicho que sostiene que cada persona cosecha aquello que siembra.
Pensando cada vez que tengo ganas de rendirme en el mañana que sueño, que anhelo con todo mi corazón.
Tratando de hacer prevalecer la racionalidad pues de lo contrario mi sensibilidad innata no me permitiría caminar con firmeza el duro camino de la vida.
Procurando no olvidarme de mis principios.
Hoy vuelvo a escribir, quizás para advertirme a mi misma que la vida no es una formula matemática, que no es pura racionalidad y que si bien la planificación de cada uno de nuestros pasos importa un modo de construir nuestro destino, también es cierto que en parte el mismo ya esta escrito.Que hay cosas que no se planifican, no se esperan y que solo suceden, así como si nada, como quien no quiere la cosa, con tanta naturalidad como agua fluye en el río.Hoy me doy cuenta que esta muy bien tener nuestras ideas en claro, pero eso no implica estar ajeno a ciertas cosas que dios o quien sabe quien pone en nuestros caminos, supongo que estuve en un extremo, respirando racionalidad, creyendo tener todo super claro, y cuando apareciste creí que eras una piedra que dios me lanzo para distraerme, para tropezarme, trate de esquivarte, de no prestarte atención pues por encima de todo están mis sueños...pensé que serias algo pasajero.Pensé, otra vez cometo el mismo error, pienso mucho!!!.En fin, conclusión ( si puede haberla) hay que cambiar el paradigma, no puedo vivir queriendo tener todo, absolutamente todo claro, pues hoy la vida me demuestra que así de la nada puede aparecer alguien que provoque un terremoto en nuestro piso y nos haga dudar no se si de todo pero si del modo que estamos parados ante la vida.
